Con solo ver el semblante del intendente de La Falda, del mensaje de este viernes 10, se percibe que los nubarrones con los cuales se empezó la semana se están disipando.

De testear a más de 200 personas, y que este viernes queden solo 19 hisopados en estudio, casi podemos augurar que la ciudad montó virtualmente un domo para que no se concrete un contagio local.

Pero no es solo una metáfora, la última familia, que sumó 8 casos, habría sido movilizada fuera de la ciudad y aislada en algún espacio de intermediación para su cuarentena.

No podemos afirmar que sea en una casa grande o pequeña, así que no vamos a ahondar en ello, si lo dispuso el COE central y se han tomado las medidas de seguridad, confiamos en que saben lo que hacen.

Ahora que pasó mucha agua por el río, los que no saben lo que hacen, y violan las recomendaciones sanitarias, son muchos más de lo que creemos, y por su condición social, algunos y no todos, no me refiero a los infectados, han defraudado a más de un ciudadano orgulloso de la segunda ciudad de Punilla.

Esperemos que los que más responsabilidad tienen en la sociedad, comiencen a dar mejores ejemplos y no solo justificaciones y excusas.